- Consumo excesivo de alcohol
- Dietas ultraprocesadas
- Hepatitis virales (B, C)
- Medicamentos hepatotóxicos (paracetamol, estatinas)
- Hígado graso no alcohólico (por obesidad)
- Enfermedades autoinmunes
- Exposición a químicos tóxicos
Diagnóstico Médico: ¿Cómo Saber Si Tengo el Hígado Dañado?
Las pruebas más frecuentes incluyen:
- Análisis de sangre: ALT, AST, GGT, bilirrubina
- Ecografía hepática o elastografía
- Pruebas virales (hepatitis B y C)
- Resonancia magnética o biopsia hepática
Es importante hacerse chequeos regulares, especialmente si tienes factores de riesgo como obesidad, antecedentes familiares o consumo de alcohol.
¿Cómo Prevenir el Daño Hepático?
La buena noticia es que muchas enfermedades hepáticas son prevenibles. Aquí algunos consejos clave:
- Mantén una alimentación balanceada, baja en grasas trans y azúcares
- No abuses de medicamentos sin receta
- Evita el alcohol en exceso
- Hidrátate bien y haz ejercicio regularmente
- Vacúnate contra la hepatitis
- No compartas objetos personales como agujas, cepillos dentales o rasuradoras