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Alimentación Equilibrada: Un déficit calórico sostenido es la clave. Prioriza alimentos reales: verduras, frutas, proteínas magras y granos enteros.
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Ejercicio Regular: Combina entrenamiento de fuerza (para ganar músculo y acelerar tu metabolismo basal) con cardio.
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Sueño de Calidad: Dormir mal aumenta la grelina (hormona del hambre) y reduce la leptina (hormona de la saciedad).
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Manejo del Estrés: El cortisol (la hormona del estrés) promueve la acumulación de grasa abdominal.
Incorpora estas bebidas a tu rutina como complemento, pero concéntrate en los pilares principales: comer bien, moverte y descansar. Esa es la verdadera fórmula para perder la grasa abdominal de forma permanente.