Comienza mezclando el plátano con el jugo de limón hasta obtener una base cremosa. Añade las espinacas y el cacao, y licúa con parte del agua hasta lograr una textura homogénea. Incorpora las semillas de chía remojadas, la miel y el agua restante. Agrega la sal marina al final. Puedes colar la bebida o consumirla con toda su fibra para aprovechar los beneficios digestivos.
Beneficios:
Esta bebida contribuye a la relajación del sistema nervioso, regula el ritmo cardíaco, mejora la calidad del sueño y alivia tensiones musculares. Además, favorece la producción de serotonina, ayudando a calmar la mente y a reducir la ansiedad. La combinación de magnesio, potasio, fibra y antioxidantes ofrece un impulso sostenido de energía, mejora la digestión y apoya la salud hormonal y cerebral.
Consumida diariamente, esta bebida puede marcar una diferencia real en cómo te sientes, piensas y descansas. Es una invitación a reconectar con el cuidado consciente del cuerpo, desde la nutrición más esencial y natural.
