Cultivar jengibre en casa es sorprendentemente fácil y muy gratificante. Aunque el jengibre (Zingiber officinale) rara vez florece en interiores, puedes mantener un suministro casi inagotable si lo cultivas y cosechas de forma inteligente. Aquí te dejo una guía paso a paso para lograrlo, incluyendo cómo puedes llegar a hacerlo florecer:
. Consigue un rizoma fresco y saludable
Compra jengibre orgánico en una tienda o supermercado (los no orgánicos pueden tener inhibidores del crecimiento).
Asegúrate de que tenga varios “ojos” o brotes visibles, similares a los de una papa.
💡 Tip: Si el jengibre está muy seco o sin brotes, déjalo en agua tibia durante la noche para rehidratarlo
2. Prepárale un hogar cómodo
Usa una maceta ancha y poco profunda, ya que el jengibre crece horizontalmente.
Mezcla tierra fértil con buen drenaje: 1 parte compost, 1 parte tierra de jardín y 1 parte arena o perlita.
🌿 Opción ecológica: También puedes usar vermicompost o humus de lombriz para un impulso natural.
3. Elige el lugar perfecto
Luz indirecta y cálida: El jengibre ama el calor y la humedad, pero no el sol directo.
Idealmente, mantenlo entre 20°C y 30°C (68°F a 86°F).
4. Riego y cuidados
Mantén la tierra siempre húmeda pero no encharcada.
Usa un pulverizador para mantener la humedad ambiental si el clima es seco.
Abona cada 3-4 semanas con fertilizante líquido orgánico (como té de compost o extracto de algas).
5. Cosecha inteligente para un suministro continuo