El bicarbonato de sodio es un producto básico del hogar increíblemente versátil, que se usa a menudo en la cocina, la limpieza e incluso en el cuidado personal. Sin embargo, uno de sus usos menos conocidos, pero muy efectivos, es el control de plagas. Este polvo simple y económico puede ayudarte a eliminar plagas comunes del hogar y el jardín sin recurrir a productos químicos dañinos. Ya sea que tengas que lidiar con cucarachas, hormigas, ratones o invasores del jardín como caracoles y babosas, el bicarbonato de sodio puede ser una excelente solución. A continuación, exploraremos las mejores maneras de usar el bicarbonato de sodio para eliminar plagas de forma natural.
Cómo usar bicarbonato de sodio para el control de plagas
1. Cucarachas
Las cucarachas son una de las plagas domésticas más persistentes. El bicarbonato de sodio puede matarlas, pero primero deben ingerirlo. Dado que el bicarbonato de sodio no las atrae de forma natural, es necesario mezclarlo con un edulcorante para atraerlas.
Lo que necesitas:
- 1/2 taza de bicarbonato de sodio
- 1/2 taza de azúcar
Instrucciones:
- Mezcla el bicarbonato de sodio y el azúcar en un bol.
- Espolvoree la mezcla en áreas donde es probable que aparezcan cucarachas, como debajo de los fregaderos, detrás de los electrodomésticos y cerca de fuentes de alimento.
- Cuando las cucarachas consumen la mezcla, el bicarbonato de sodio reacciona con el agua dentro de sus cuerpos, creando gas y expandiéndose, y finalmente matándolas.
2. Hormigas
Las hormigas pueden ser una molestia, pero el bicarbonato de sodio proporciona una forma eficaz de eliminarlas.
Lo que necesitas:
- 1/2 taza de bicarbonato de sodio
- 1/2 taza de azúcar
Instrucciones:
- Mezcle partes iguales de bicarbonato de sodio y azúcar.
- Espolvorea la mezcla en las áreas donde hayas visto hormigas, especialmente cerca de los puntos de entrada o a lo largo de sus caminos.
- El azúcar atrae a las hormigas, mientras que el bicarbonato de sodio altera su sistema digestivo, provocando su eliminación.
3. Ratones y ratas
Los roedores no pueden expulsar gases, por lo que el bicarbonato de sodio es una forma eficaz de eliminarlos.
Lo que necesitas: