No consumir en embarazo (puede ser abortiva).
Evitar en enfermedades hepáticas graves.
No exceder la dosis (puede causar náuseas o diarrea).
No sustituye tratamientos médicos (consultar antes).
¿CÓMO CONSUMIRLA? (3 FORMAS SEGURAS)
INFUSIÓN DE KALANCHOE
Ingredientes:
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5-7 hojas frescas de Kalanchoe
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1 taza de agua caliente
Preparación:
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Lava bien las hojas.
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Machácalas ligeramente y hierve en agua 5 min.
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Deja reposar 10 min, cuela y bebe 1 taza al día.
JUGO FRESCO (Para uso medicinal intensivo)
Ingredientes:
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10 hojas frescas de Kalanchoe
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½ vaso de agua
Preparación:
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Licúa las hojas con agua.
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Cuela y toma 1 cucharada, 3 veces al día (máximo 3 semanas).
UNGUENTO PARA HERIDAS Y DOLORES
Ingredientes:
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10 hojas frescas de Kalanchoe
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2 cucharadas de aceite de coco
Preparación:
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Tritura las hojas hasta formar una pasta.
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Mezcla con aceite de coco y aplica en heridas, moretones o articulaciones doloridas.
¿DÓNDE CONSEGUIRLA?
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Cultivo en casa: Crece fácil en macetas (necesita poca agua).
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Herbolarios y tiendas naturistas (hojas secas o extractos).
CONSEJOS CLAVE
Dosis segura: No más de 30 g de hojas frescas al día.
Uso tópico: Ideal para acné, eccemas y psoriasis.
Sabor amargo: Mezcla con miel o jugo de piña.
CONCLUSIÓN
La Kalanchoe es una aliada poderosa de la salud, pero debe usarse con precaución y conocimiento. Ideal para complementar tratamientos naturales bajo supervisión.
¿Quieres una receta de jarabe de Kalanchoe para la tos? ¡Déjame saber!
