La Ashwagandha es una raíz ayurvédica famosa por ayudar al cuerpo a adaptarse al estrés. Se vende en polvo o en bolsitas de infusión.
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Para el Estrés y los Nervios: Es un “adaptógeno”, meaning que ayuda a regular la respuesta de tu cuerpo al estrés, bajando los niveles de cortisol.
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Para la Energía y el Insomnio: Al manejar mejor el estrés, tu energía natural mejora y el sueño se ve beneficiado. Combate la fatiga adrenal.
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Para la Memoria: Algunos estudios sugieren que puede mejorar la función cognitiva y la memoria al reducir el estrés oxidativo en el cerebro.
Nota: Su sabor es terroso y fuerte. Mucha gente la mezcla con leche caliente (o vegetal) y miel (el “Moon Milk” o “Leche Lunar” para dormir).
Recomendaciones Adicionales
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Ginkgo Biloba: Específicamente famoso por mejorar la memoria y la circulación (especialmente la cerebral). Es una de las mejores opciones para ese propósito específico.
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Romero: Su infusión es excelente para mejorar la memoria y la concentración, y también es un buen estimulante circulatorio.
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Tila: Clásica para calmar los nervios y el estrés, facilitando el sueño.
Consejos Importantes
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Consulta a tu médico: Si estás tomando medicación (especialmente para la presión arterial, diabetes o anticoagulantes), embarazada o en lactancia, consulta con un profesional antes de añadir nuevas hierbas a tu rutina.
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Consistencia es clave: Los efectos de las infusiones son sutiles y acumulativos. Tómalas de forma regular para notar los beneficios.
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Hábitos saludables: Ninguna infusión funcionará bien si no la acompañas con una buena higiene del sueño, alimentación balanceada, hidratación y algo de ejercicio.
En resumen, para un efecto más completo, te recomiendo:
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Por la mañana/tarde: Té Verde con Jengibre y Menta.
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Por la noche: Manzanilla con Lavanda o Ashwagandha en leche caliente.
¡Espero que te sean de gran ayuda
