* Mejora la digestión:
El aceite de oliva actúa como un lubricante natural para el sistema digestivo, facilitando la digestión y ayudando a combatir el estreñimiento.
* Desintoxicación:
El limón, con sus propiedades alcalinas y desintoxicantes, ayuda a eliminar toxinas acumuladas en el cuerpo.
* Protección cardiovascular:
El aceite de oliva, especialmente el virgen extra, es rico en antioxidantes y ácido oleico, que ayudan a mantener un corazón sano y a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
* Potencial efecto antiséptico y antibacteriano:
El limón puede contribuir a estas propiedades, lo que podría ser beneficioso para la salud intestinal.
