El llantén (Plantago major) es una planta medicinal que ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional por sus múltiples propiedades curativas. Común en jardines, caminos rurales y terrenos baldíos, esta humilde planta esconde un gran potencial terapéutico que muchas veces pasa desapercibido. Sus hojas, ricas en mucílagos, flavonoides, taninos y vitaminas, hacen del llantén un remedio natural excelente para distintas afecciones tanto internas como externas.
Beneficios del llantén para la salud
1. Alivio de problemas respiratorios
El llantén es muy conocido por sus propiedades expectorantes y antiinflamatorias. Ayuda a aliviar la tos, el resfriado, la bronquitis y otros problemas respiratorios. Sus mucílagos calman la garganta irritada y reducen la inflamación de las vías respiratorias.
2. Mejora la salud digestiva
El consumo de infusiones de llantén ayuda a calmar la mucosa del estómago, siendo útil en casos de gastritis, acidez o úlceras. También puede actuar como un suave laxante, ideal para combatir el estreñimiento sin irritar el intestino.
3. Acción cicatrizante y antiinflamatoria
Aplicado de forma externa, el llantén ayuda a cicatrizar heridas, cortes, quemaduras leves y picaduras de insectos. Su acción antibacteriana y antiinflamatoria lo convierte en un remedio ideal para tratar la piel de manera natural.
4. Propiedades diuréticas
El llantén favorece la eliminación de toxinas a través de la orina, ayudando a limpiar los riñones y prevenir infecciones urinarias.
5. Ayuda en afecciones bucales
Enjuagues con infusión de llantén pueden calmar las encías inflamadas, aliviar llagas o aftas bucales y reducir el dolor de garganta.
¿Cómo se utiliza el llantén?
Para infusión interna: