Aquí tienes 3 remedios naturales muy efectivos para aliviar la tos seca, explicados para que sepas por qué y cómo usarlos.
La tos seca (no productiva, sin flemas) suele ser causada por irritación o inflamación en la garganta y las vías respiratorias superiores. Estos remedios actúan calmando esa irritación y humectando la zona
1. Miel con Limón (El Clásico Infalible)
Por qué funciona:
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La Miel: Es el ingrediente estrella. Tiene propiedades antibacterianas y antisépticas suaves. Su textura viscosa recubre la garganta, formando una película protectora que calma la irritación y reduce el reflejo de la tos. Estudios han demostrado que puede ser tan o más efectiva que algunos jarabes para la tos.
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El Limón: Es rico en vitamina C, que ayuda a reforzar el sistema inmunológico. Además, su acidez ayuda a cortar la densidad de la miel y puede combatir gérmenes.
Cómo prepararlo y usarlo:
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Calienta una taza de agua (no es obligatorio, pero el calor ayuda a calmar más).
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Añade el jugo de medio limón fresco.
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Incorpora 1 o 2 cucharaditas de miel (preferiblemente miel pura de abeja).
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Remueve bien y bébelo mientras esté tibio.
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Puedes tomarlo 2-3 veces al día, y especialmente antes de dormir para reducir la tos nocturna.
Precaución: Nunca des miel a niños menores de 1 año debido al riesgo de botulismo infantil.
2. Infusión de Jengibre (El Antiinflamatorio)
Por qué funciona: