El dulce de diente de león (o miel de diente de león) es una preparación deliciosa y natural que aprovecha las flores de esta planta común. Tiene un sabor similar a la miel y se puede usar como acompañamiento de pan, postres o infusiones. Aquí tienes dos recetas populares:
1. Miel de Diente de León (Dandelion Honey)
Ingredientes:
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2 tazas de flores frescas de diente de león (solo los pétalos, sin el tallo verde)
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4 tazas de agua
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2 tazas de azúcar (o 1½ tazas si prefieres menos dulce)
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1 cucharadita de jugo de limón (opcional, para evitar la cristalización)
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1 ramita de canela o 1 cucharadita de vainilla (opcional, para aromatizar)
Instrucciones:
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Recolecta las flores en un día soleado (evita zonas contaminadas o tratadas con pesticidas).
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Lava los pétalos suavemente para eliminar insectos o polvo.
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En una olla, hierve el agua y agrega los pétalos. Cocina a fuego lento por 10 minutos, luego apaga y deja reposar 24 horas (en la nevera) para extraer el sabor.
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Cuela el líquido (con un paño fino o colador) y presiónalo para extraer todo el jugo.
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Vuelve el líquido a la olla, agrega el azúcar, el limón y la canela/vainilla. Hierve a fuego medio-bajo por 1-1½ horas, revolviendo ocasionalmente, hasta que espese (debe tener consistencia de sirope o miel ligera).
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Enfría y guarda en un frasco de vidrio esterilizado. Dura hasta 1 mes en la nevera.
2. Jarabe de Diente de León (para tos o como endulzante)
Ingredientes:
